Hace meses que escribí esta breve entrada y no me había vuelto a acordar de ella, pero creo que el libro merece lo suficientemente la pena como para recogerla de nuevo del baúl de los recuerdos, hacerle un par de retoques y ponerla a vuestra disposición.
En el verano del 2013 me inicié en la novela histórica con la primera novela de la saga "Los hijos de la tierra" de Jean M. Auel, "El clan del oso cavernario", que ya de paso, recomiendo también (estoy deseando leer los siguientes próximamente). En el verano de 2014 cambié un poco de época, viajando desde la Prehistoria para situarnos en un pasado no muy lejano de la mano de Matilde Asensi con "El último Catón", en el que los ordenadores, móviles e Internet ya existen pero que es capaz de transportarnos a épocas más antiguas a lo largo de sus aventuras.
En el verano del 2013 me inicié en la novela histórica con la primera novela de la saga "Los hijos de la tierra" de Jean M. Auel, "El clan del oso cavernario", que ya de paso, recomiendo también (estoy deseando leer los siguientes próximamente). En el verano de 2014 cambié un poco de época, viajando desde la Prehistoria para situarnos en un pasado no muy lejano de la mano de Matilde Asensi con "El último Catón", en el que los ordenadores, móviles e Internet ya existen pero que es capaz de transportarnos a épocas más antiguas a lo largo de sus aventuras.
Si queréis saber un poco más sobre este fantástico libro, seguid leyendo.
Sinopsis
La hermana Ottavia Salina trabaja en los archivos secretos del Vaticano, entre textos e ilustraciones de siglos de antigüedad. La aparición del cadáver de un etíope con unas extrañas marcas en su cuerpo y unos trozos de madera, la llevará a ella, junto con el profesor Boswell y el Capitán de la Guardia Suiza, Glauser-Röist a un viaje a través de siete ciudades, guiados nada más y nada menos que por Dante y su Divina Comedia. Desde Roma, pasando por Rávena, Atenas, Jerusalén, Constantinopla y Alejandría, para acabar en Antioquía, recorrerán las iglesias de estas ciudades en una trepidante aventura que los llevará a descubrir quién es el último Catón y la relación de este con la Vera Cruz de Cristo.
¿Por qué me animé a leer este libro? En primer lugar, por recomendación de unas amigas (que siempre es un buen motivo), y en segundo lugar porque siempre me han parecido interesantes las historias sobre la búsqueda de reliquias (la película de "El código Da Vinci", o "La Búsqueda", de Disney, por ejemplo), pero nunca me había atrevido con una novela de este tipo. Me gustan esas aventuras en las que los personajes acaban encerrados en unas catacumbas, en unos pasadizos o en una cámara subterránea, descifrando códigos y claves para abrir la puerta que los lleve al siguiente acertijo, que será tanto o más complejo que el que acaban de resolver. Eso es exactamente todo lo que encontré en "El último Catón". Y si a la aventura le sumas una pequeña dosis de drama y otra pequeña dosis de romanticismo (los que lo hayáis leído sabréis por qué lo digo y los que no, ya lo descubriréis), consigues lo que consigue esta novela: atraparte entre sus letras y conquistarte totalmente.
Después de leer esta obra, solo deseo poder leer en un futuro más trabajos de esta autora. La historia combina todo lo que puede tener una buena novela histórica con el suspense de una novela policíaca y la trama va mejora conforme avanzan las páginas hasta que llega un momento que no puedes parar de pasarlas y a la vez no quieres seguir para que no acabe. Dicen que no se puede viajar en el tiempo, pero con los libros cualquier cosa es posible: Matilde Asensi lo ha conseguido.
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