Separate lives.

Te juro que no te entiendo y, a veces creo que no te entiendes ni tú. Solo me gustaría que me dieras un motivo, que me explicaras que es lo que nos ha llevado a esta situación y a lo mejor así podríamos solucionarlo. Pero que sea rápido, porque tengo paciencia, pero no tanta y ya he esperado mucho tiempo.
Ya hace mucho que nuestras vidas afluyeron al mismo río y durante el largo recorrido hemos aprovechado y disfrutado todo lo que hemos podido, pero, por lo visto, estamos llegando ya al mar y es el momento en que nuestras vidas vuelven a separarse. Nos adentraremos en el inmenso océano del mundo, y quién sabe si quizás no volvamos a encontrarnos...
No te queda otra, sigue nadando, avanza y, a lo mejor, algún día, podremos, cómo los salmones, regresar al río donde un día nos separamos...

To find a better road.

Nada puede pararte ya. El tiempo corre ladera abajo mientras tú, con esfuerzos, escalas hasta la cima. ¿Está lejos? Todo es muy relativo, depende de la perspectiva desde la que la veas. Hay gente que opina que sí, y otros que no. Somos muchos en este mundo.

Todavía no te has cansado, pero lo estarás, y en tu camino no encontrarás ningún claro, ninguna llanura donde sentarte a tomar aliento. Tendrás que aguantar como puedas y seguir adelante, sin abandonar, porque eso es lo más importante, llegar.

¿Quién sabe cuánto tiempo falta? Lo importante es afrontarlo con energía y ver más allá del montón de piedras que te encontrarás en el camino. No importa cuantas veces tropieces, debes seguir adelante.

Piensa, solo por unos instantes que, una vez que hayas llegado, las vistas serán maravillosas y que tendrás el mundo a tus pies, podrás elegir la nueva dirección de tu vida, el próximo destino, pero esta vez cuesta abajo, con el tiempo a tu favor, avanzando junto a ti.